Santa Cruz:

Servicio de micros, un negocio que mueve más de $us 300 millones al año

Según entendidos y concejales, el nudo del conflicto del transporte es lo que se genera en torno al servicio, ya que el sector mueve casi $us 1 millón al día en pasajes. Esto es descartado por la dirigencia. Piden modernizar el sistema

En medio del rechazo de los transportistas a la Ley de Movilidad Urbana, entendidos y concejales aseguran que el fondo del conflicto es el negocio que se genera con el servicio del transporte en la ciudad, ya que los micreros mueven más de $us 300 millones anuales en el cobro de pasaje.

“Lo primero que se debe aclarar es que el sistema de transporte en la ciudad no es público. Son privados que prestan un servicio público y ahí está el negocio, ellos están lucrando con el servicio”, señala el especialista en desarrollo urbano, Rolando Schrupp.

Considera que el nudo del problema es que el transporte público mueve Bs 6 millones al día, lo que al año son Bs 2.190 millones. Esto significa casi $us 1 millón al día, es decir, $us 312 millones anuales.

Schrupp basa sus cálculos en un estudio del JICA de 2017, que establece que en la ciudad se mueven cada día al menos 750.000 personas en las unidades de transporte. Cada persona gasta, en promedio, Bs 8 al día en pasaje, ya que usa al menos dos micros en cada viaje (dos de ida al lugar de trabajo o destino y dos de vuelta hasta el hogar).

El concejal de la C-A, José Alberti, señala que, considerando la explosión demográfica, ahora el número de usuarios sobrepasa las 750.000 personas, por lo que coincide en que “el transporte público es un negocio millonario, lo mismo que el comercio en mercados”.

“¿Si es un negocio tan grande, por qué no hacemos un mejor modelo para los ciudadanos?”, indica Alberti, al observar las políticas municipales, que no consiguen reordenar el transporte.

Al respecto, el dirigente del sector, Mario Guerrero, señala que los cálculos carecen de un respaldo técnico y no muestran la realidad del transporte. Niega que cada persona gaste Bs 8 al día en pasaje, sino solo Bs 4.

Señala que se deberían hacer estudios serios, “porque no es fácil prestar un servicio cuando la tarifa está congelada desde hace diez años”.

Explica que los insumos y repuestos de los vehículos suben cada vez y el mantenimiento de las unidades se cubre con la recaudación de hace una década. Además, pide considerar que detrás de cada transportista hay una familia, que también se ve afectada por el encarecimiento de la canasta familiar y con el costo de vida, que cada vez es más alto. “Tampoco no hay congelamiento de los impuestos”, complementa.

Necesidad de un cambio

Schrupp también insiste en que urge un cambio del sistema de transporte, toda vez el mal servicio se refleja en el tiempo que pasa un usuario en su traslado, pues emplea cerca de tres horas y media, cuando debería ser una hora. “Este sistema le roba al usuario dos horas de su vida, por lo que el 25% de su capacidad productiva está secuestrada en un sistema ineficiente”, dice.

Esto no solo repercute en la calidad de vida de las personas, que tienen menos tiempo para estar en sus hogares, sino también representa tres horas de capacidad productiva que afecta a la economía, es decir, se impide que la gente produzca.

A esto se suma que de las 154 líneas que operan en la ciudad, solo dos tienen autorización para prestar servicio en la ciudad y el resto lo hace de forma irregular, pero cree que la solución no está en darles las rutas en concesión por diez o quince años, como plantea el municipio, sino en migrar a un sistema integrado de transporte.

El concejal por Demócratas, Manuel Saavedra, pide avanzar en el reordenamiento, ya que hasta ahora el plan municipal se ha limitado al registro de conductores y unidades.

El alcalde se pronuncia

El alcalde Jhonny Fernández ratificó ayer que el plan de reordenamiento sigue en marcha y que el primer paso es el registro.

Dice que la aplicación de la Ley de Movilidad Urbana permitirá regularizar y modernizar el transporte en la ciudad, ya que ahora más del 35% de los micros tiene más de 30 años de antigüedad. “Son cacharros, que ponen en peligro a los ciudadanos”, indica.

Además, señala que el 32% de las unidades tributa en otros municipios. “Están lucrando con nuestras rutas y no pagan impuesto en Santa Cruz de la Sierra”, insiste.

Anoche el sector transporte determinó suspender sus medidas de presión, después que el Concejo Municipal fijara una audiencia para el 7 de septiembre.