El contrabando de diésel se da en cisternas y no en bidones, señalan desde la CNI

La Cámara Nacional de Industrias (CNI) alertó que el contrabando de diésel en Bolivia no se da en bidones pequeños, sino en cisternas de gran capacidad, lo que evidencia la magnitud del problema. Según el expresidente del gremio, Pablo Camacho, este desvío de combustible no solo cruza fronteras, sino que también abastece a la minería ilegal y al uso en vehículos irregulares o robados, impactando en los precios de los productos industrializados.

Escasez de diésel afecta a toda la cadena productiva

En entrevista con Canal Rural, Camacho explicó que la escasez de diésel en Bolivia se arrastra desde hace más de 18 meses y afecta directamente al sector productivo, al transporte y, en última instancia, al consumidor final.

“Está ralentizando la economía porque no podemos acopiar ni distribuir productos. Nuestros costos se incrementan al tener choferes y vehículos parados por horas y hasta días sin el combustible necesario”, sostuvo el exdirigente.

Contrabando en cisternas y falta de control estatal

El representante industrial recalcó que el contrabando no sale en bidones como comúnmente se cree, sino en cisternas que abastecen a actividades ilícitas.

“El contrabando señores no sale en bidones, llega en cisternas a la minería ilegal, al contrabando de vehículos y al consumo de autos truchos y robados que ingresan desde países vecinos”, señaló Camacho.

Asimismo, cuestionó la ausencia de control por parte de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) y del Viceministerio de Sustancias Controladas.

Transporte pesado denuncia crisis en el sector

Por su parte, Marcelo Cruz, dirigente del transporte pesado internacional, confirmó que actualmente solo entre el 60% y 70% de los camiones está en circulación debido a la falta de carburante.

Los choferes enfrentan condiciones críticas en las largas filas: problemas de salud, falta de acceso a servicios básicos, estrés y dificultades para retornar a sus hogares. “Reiteramos el pedido de plena libertad para la importación del carburante, sin burocracia ni cargas de ninguna índole”, señaló Cruz.

Riesgo para la economía nacional

Finalmente, Camacho advirtió que si no se flexibiliza la importación de diésel en Bolivia, la economía seguirá deteriorándose, a la espera de un cambio de políticas energéticas con la llegada de un nuevo gobierno.

FUENTE: UNITEL