Un hombre guardó 7,000 computadoras de Apple para venderlas después: la compañía las recuperó y averigua que hizo con ellas
Una persona compró 7,000 computadoras de Apple en la década de 1980 para venderlas más tarde, pero la compañía se enteró, las recuperó y terminó enterrándolas en un vertedero.
Ese es el resumen de la historia de Bob Cook, quien adquirió 7,000 equipos Lisa que le quedaban a la compañía, con la intención de modificarlos y revenderlos. Sin embargo, antes de que pudieran hacerlo, Apple los recuperó y los destruyó.
El lanzamiento y fracaso de Lisa
En 1983, Apple lanzó Lisa, una de las primeras computadoras personales que podía manejarse usando un entorno gráfico o interfaz de usuario. A pesar de las innovaciones que presentaba, el producto fue un fracaso, principalmente debido a su precio de 10,000 dólares estadounidenses y una serie de problemas.
Por ejemplo, aunque su sistema operativo estaba diseñado para realizar múltiples tareas, el hardware del equipo se vio superado, lo que provocaba errores entre componentes como la bahía de disquete, que no funcionaba correctamente.
La Apple Lisa también enfrentó una dura competencia, vendiendo únicamente 30,000 unidades, ya que debía destacar contra la Macintosh, que se ofrecía por 2,500 dólares o con las computadoras de IBM.
Dos años después de su lanzamiento, en 1985, Apple descontinuó el proyecto, lo que dejó a la compañía con un inventario de 7,000 computadoras guardadas. A pesar de no querer venderlas, ofrecieron a Bob Cook la oportunidad de adquirirlas.
El negocio de la reventa
Cook tenía la intención original de ser un vendedor de nuevos productos de Apple, pero ya que su negocio no iba bien, se le ocurrió vender ordenadores antiguos a un precio más bajo en lugar de ofrecer los actuales.
Esta práctica la demostró con éxito con su empresa Sun Remarketing y el Apple III, comprando 3,500 de estos equipos a bajo precio y revendiéndolos a un costo accesible.
Sin embargo, para el Apple Lisa, Cook tenía planes más interesantes. Ya que estaban técnicamente obsoletos, procedió a actualizarlos con un nuevo sistema operativo de Macintosh, mejorando la unidad de disquete, aumentando la RAM y utilizando un disco duro más grande. En total, invirtió 200,000 dólares en la revisión general del equipo.
A su modelo de la Lisa, Sun Remarketing le llamó "Lisa Professional". Antes de que pudieran empezar a venderse, Apple se llevó todos los equipos en 1989. Todo indica que la compañía tenía una cláusula en los contratos con Cook que les permitía recuperar en cualquier momento sus computadoras.
Las ventajas de destruir las computadoras
Según The Verge, que documenta el movimiento, las 7,000 Lisas que Sun Remarketing tenía en su poder fueron recogidas por Apple, destruidas y enterradas en un vertedero de Logan, Utah.
Este movimiento sin duda recuerda al del juego de Atari "ET: El extraterrestre", que también fue enterrado. Sin embargo, en el caso de Apple, el evento no se ocultó, especialmente después de que un periódico local informara sobre el movimiento.
Apple también tomó una postura bastante abierta al respecto, señalando que la destrucción de estas computadoras había sido beneficiosa para el negocio. Al destruirlas, la compañía recibió aproximadamente 34 dólares de desgravación fiscal por cada 100 de valor depreciado. Al retirarlas, la empresa se ahorró el servicio de los dispositivos, aunque Sun Remarketing los vendiera y reparara.
Para Cook, esto no es así, ya que él supone que Apple simplemente quería borrar las Lisas de la memoria colectiva de la gente. El fracaso no habría encajado con la imagen que la marca quería transmitir al mundo.
Además, el movimiento también recibió críticas, ya que en lugar de enterrar las computadoras, muchas de sus piezas pudieron ser recicladas.
Aún hay dudas sobre el caso
Por ahora no queda claro si Apple compensó a Bob Cook por el esfuerzo financiero en la actualización de las Lisa, ni la cantidad real de equipos que pudieron ser enterrados. Algunas fuentes tienen discrepancias al respecto e indican que la compañía únicamente recuperó 2,700 ordenadores.
Aunque una de las explicaciones para esta variante en las cifras puede ser que Cook haya vendido algunas de las Lisas revisadas, por ahora no queda claro exactamente cuál es la razón.