¿TikTok provoca adicción como las drogas?

El uso excesivo de redes sociales como TikTok e Instagram preocupa cada vez más a expertos en salud mental y políticos en Alemania. Según varios estudios, su impacto en el cerebro de los adolescentes guarda similitudes con el consumo de drogas, lo que reaviva el debate sobre prohibir las redes sociales a menores de 16 años.

Redes sociales y el cerebro: similitudes con las drogas

El líder conservador alemán Jens Spahn comparó recientemente los efectos de TikTok e Instagram con la heroína, alegando que actúan en el cerebro de forma similar. Aunque la comparación genera polémica, la Academia Alemana de Ciencias Leopoldina advierte que una parte importante de los jóvenes presenta comportamientos adictivos, como pérdida de control, abandono de otras actividades y síntomas de ansiedad y depresión.

¿Adicción digital reconocida médicamente?

El psicólogo Christian Montag, experto en adicciones, aclara que la adicción a las redes sociales aún no es un diagnóstico oficial. Si bien existen indicios de cambios cerebrales vinculados al uso excesivo, los estudios son limitados y todavía no confirman una equivalencia médica con drogas como la heroína. Montag advierte que una comparación simplista puede generar pánico moral y que se necesitan criterios más claros para diferenciar entre uso normal y comportamiento dañino.

Consecuencias psicológicas y sociales

Los estudios muestran que los adolescentes que usan redes sociales de manera compulsiva sienten cada vez menos satisfacción con los “me gusta” y notificaciones, lo que los lleva a buscar más estímulos, en un círculo similar al de las adicciones. Entre las consecuencias más frecuentes se destacan:

  • Ansiedad y depresión.
  • Problemas de sueño.
  • Síntomas de abstinencia al no tener acceso al móvil.
  • Pérdida de concentración y descuido de actividades cotidianas.

Debate político: ¿prohibición o educación digital?

Aunque Spahn propone prohibir el acceso a redes sociales a menores de 16 años, expertos advierten que una medida así sería difícil de implementar y podría violar derechos fundamentales. Además, los bloqueos técnicos suelen ser ineficaces, ya que los adolescentes encuentran maneras de eludirlos.

Los especialistas sostienen que la mejor alternativa no es una prohibición absoluta, sino fortalecer la educación digital, para que los jóvenes aprendan a usar las redes de manera responsable.

FUENTE: DW