“No valen nada”: tiró 140 toneladas de tomate y embistió contra el contrabando desde Bolivia

Un camión con todo el tomate que se desechará

La horticultura en Salta atraviesa una de sus peores crisis en años. La caída del precio del tomate, sumada al aumento de costos de producción y al ingreso de productos de contrabando desde Bolivia, ha llevado a los productores a descartar buena parte de sus cosechas, lo que pone en jaque la sostenibilidad del sector.

Produunció que ya se tiraron más de 140 toneladas de tomate y unas 60 de berenjena, debido a que el precio de venta no cubre ni los costos básicos.

“El cajón de tomate está en $2.500, cuando producirlctores advierten que la actividad es insostenible

El horticultor Fernando Ortiz deno sale mucho más. Con la banana y la berenjena pasa lo mismo. No podemos competir con el contrabando ni con países que tienen costos en dólares mucho más bajos”, explicó.

El impacto del contrabando desde Bolivia y Paraguay

Si bien los registros oficiales del Senasa no muestran ingreso de tomates desde Bolivia, productores salteños aseguran que en el Mercado Central circula mercadería proveniente de ese país.

Ortiz agregó que los insumos, fertilizantes, energía y maquinaria resultan mucho más costosos en Argentina, lo que genera una competencia desleal con países vecinos.

Cifras del ingreso de productos hortícolas al país

  • En lo que va de 2025 ingresaron oficialmente 7.633 toneladas de tomate, principalmente desde Chile (7.586 t) y Brasil (47 t).

  • En el mismo período, se importaron 311.686 toneladas de banana desde Ecuador, Bolivia, Paraguay, Brasil y Colombia, un 13% más que en todo 2024.

Productores recurren a nuevas alternativas

Ante la falta de mercado, Ortiz comenzó a destinar parte de su producción de tomates a la elaboración de despulpados envasados, aunque aclaró que no es su actividad principal.

Además, muchos productores optan por regalar bananas y otras frutas a vecinos para consumo propio, en un intento de evitar que la cosecha termine pudriéndose en el campo.

“Estamos devastados. Bajamos la superficie de cultivo y reducimos insumos, pero aun así no hay ventas. La horticultura se volvió inviable en Salta”, advirtió el productor.
FUENTE: LA NACION